“Es tiempo de interrogarse sobre la influencia de las redes sociales en la orientación de nuestro comportamiento político”.
11/20/2015 04:29:00 p. m.
¿Qué influye en nuestras elecciones?
Por Hasardevi
20 de Noviembre, 2015
En Francia, como en toda Europa, y el mundo, vastos
problemas se ciernen sobre la población desde hace algún tiempo y la
solución a éstos por parte de los gobiernos, parece más lejana.
Lo que sólo parecía ocurrir en países menos favorecidos o
de plano “en desarrollo” –eufemismo para
subdesarrollados, muy corruptos y sobre-explotados, a partir de algunos años
comenzó también a minar la economía y la forma de vida de aquellos de los países
desarrollados, en este caso, eufemismo para colonizadores, imperialistas…
Asuntos como el desempleo, las crisis económicas, la
pérdida de derechos en asuntos vitales como la salud, las pensiones, la educación
gratuita y varios más, fueron tomando auge en estos países mientras que la
inseguridad, siempre al borde de una conflagración mundial, siempre con hechos
sangrientos debidos al terrorismo (de todo tipo), ocupan las discusiones en los
medios y dan lugar a movimientos ciudadanos de aquellos que cada vez están más
convencidos de que esto es lo que está sucediendo:
Los ricos (un 1% de la
población mundial) lo son cada vez más, la clase media está sobreviviendo a
duras penas y los pobres proliferan; 2) El perpetuo estado de shock que se
impone a los pueblos con el fin de manipularlos mejor; 3) El avance del control
sobre los medios masivos se dirige ahora en contra de los derechos a la
libertad individual y el espionaje en las redes se hace cada vez más evidente.
A la luz de lo anterior, los
atentados terroristas del 13 de noviembre en Francia, vienen a reforzar las
prácticas de control sobre los derechos de los ciudadanos y una de las
consecuencias que puede haber, es el afianzamiento de la ultra derecha ahí. Y
es que como los franceses dicen, hay de derechas a derechas. No es lo mismo la
derecha de Sarkozy que la de Chirac, por supuesto. Y no es lo mismo la
izquierda de Hollande, que ha tomado medidas en contra de los trabajadores y
cuya política exterior se ha subsumido a la de los EEUU, que la de Mélenchon en
el Parti de Gauche cuya claridad acerca del significado de la República es así
expresada: “La República no es un régimen neutro: Tiene un contenido.” “Para mí,
la identidad republicana de la Francia es Libertad, Igualdad, Fraternidad.” “Me
incomoda la cuestión de la identidad: yo más bien creo en la identidad
republicana”.
Hoy, el peligro es la derecha ultra de Marine
Le Pen, la cual por cierto y tal como ocurre en México con el PRIAN, aunque con
gran distancia en las circunstancias, es apoyada por los menos
instruidos, especialmente jóvenes en la precariedad laboral que no ven claro su
futuro, según un estudio realizado por el sociólogo Sylvain Crépon (http://www.lexpress.fr/actualite/politique/moins-on-est-eduque-plus-on-vote-fn_1100733.html)
a diferencia de aquellos que siguen a Mélenchon, que son más instruidos y
politizados. También es un hecho documentado que el voto para Andrés Manuel López Obrador y Morena ha estado en los sectores de clase media y con mayor nivel de estudios de la población.
Y aparece de nuevo –como en
los atentados del 11 de Septiembre de 2001 en los EEUU- el fantasma del
espionaje y la sospecha sobre todo individuo.
En un artículo publicado hace
un par de días en L’Observateur por el investigador en neurociencias Romain
Ligneul se lee la siguiente invitación
que hace Facebook: “Cambie su foto”, y se proporciona la opción de
poner la bandera de Francia o superponerla en el perfil de identificación.
Este ofrecimiento de FB, nótese que en voz imperativa: "cambie", facilita
en gran medida la decisión del usuario a adoptar este código de color en respuesta
a los atentados en París, dice Ligneul, quien apunta al comienzo del mismo: “Es
tiempo de interrogarse sobre la influencia de las redes sociales en la
orientación de nuestro comportamiento político”.
Se hace evidente que
esta iniciativa refuerza la presencia de facto de la bandera francesa en la red
social, pero también, dice el artículo de marras, esto da la oportunidad para
que FB pruebe qué tanto los usuarios adoptan los comportamientos sugeridos por
la empresa… y a través de ello, se obtiene información valiosa sobre la
influencia directa que se puede ejercer en ciertos usuarios.
Además, si
bien se puede interpretar la adopción sugerida por FB como un “apoyo a Francia
y a los parisinos”, algunos pueden encontrar en esto la exacerbación del patriotismo e
incluso una posición política. Por su exactitud, esta información es un centro
útil para la exploración y análisis de la enorme cantidad de información que
Facebook recolecta cada día acerca de los usuarios (conversaciones,
publicaciones, contenido compartido, etc.). Y hay que tomar en cuenta que siendo
públicas las imágenes del perfil, dicha información también puede ser analizada
por terceros: gente del gobierno, comerciantes, etc.
Pero lo que sea que
elijamos, dice este artículo que analiza la información a la que Facebook tiene
acceso con simplemente ofrecer poner en el perfil los colores de la bandera de
Francia, FB puede calcular fácilmente la proporción de contactos que se han
suscrito a esta opción, es la red social de los individuos la que se analiza.
Así, si uno elige no tomar la opción que da FB, y 21% de los contactos sí lo
hacen, eso significa probablemente que no se es “rabiosamente anti-Francia y
más aún, pro-djihad”.
¿Qué significa eso?
La cifra refleja el bagaje cultural, el medio social en que se desenvuelve; una
proporción del 70% sugeriría un medio social más inclinado a un nacionalismo
político, mientras que una proporción de 0% podría reflejar la pertenencia a un
medio radicalizado… Información muy valiosa para los dispositivos de vigilancia
automatizados recientemente estabecidos en la Ley de Inteligencia. Todo esto
permite a FB saber qué es lo que influye a los usuarios.
Una interesante
conclusión a la que llega este artículo se encamina así:
“Exigir transparencia
en los algoritmos”
“Durante mucho tiempo
se ha sabido que Facebook filtra las publicaciones mostradas en los muros de
acuerdo con las afinidades y varios otros parámetros opacos, a pesar del
control propuesto para los usuarios. ¿Cómo se utilizarán los nuevos datos
discutidos aquí?
Ahora está claro que
el manejo de los contenidos disponibles en la web tiene una considerable
influencia en las opiniones e intenciones de voto de los ciudadanos.”
“Un estudio publicado
este año en la prestigiosa revista PNAS muestra que mediante la manipulación de
los sitios de información política de clasificación en un motor de búsqueda
como Google, puede modificar hasta el 20% de la intención de voto.
Ligneul es cauto al afirmar: "Hasta que se
demuestre lo contrario, ni Facebook ni Google practican este tipo de
manipulación deliberada y selectiva de las fuentes de información disponibles para sus
usuarios, pero teniendo en cuenta la creciente importancia de
estas plataformas en el debate público, sería prudente inducir a nuestros
gobiernos a exigir transparencia total de los algoritmos [PDF] de referencia y ‘selección
inteligente’ de los contenidos utilizados por estas empresas.”
El riesgo de abuso se
hace presente ante la oportunidad que ofrece Facebook para superponer con un clic
la bandera de Francia (o cualquier otra opción) para presentar las fotos de
perfil, y esto es debido a que se sabe que los seres humanos también ajustan a
posteriori sus opiniones, con el fin de hacerlos más consistentes con las
decisiones tomadas. Este fenómeno se conoce como la “resolución de disonancia
cognitiva” e implica “que si se fuerza o se incita fuertemente a los individuos
a hacer una elección, se les fuerza igualmente a justificar dicha elección,
tanto por sí mismos como con respecto a los demás, por lo que después de haber
enarbolado los colores azul-blanco-rojo, se tendrá tendencia –en promedio- a
ser un poco más patriota que antes.”
“Por otra parte, se
sabe también que nadie escapa a las presiones de la conformidad o concordancia
social, ya que uno se construye con relación al otro. Experimentos famosos han
llegado a demostrar que dos líneas de magnitud claramente diferente tienden a
apreciarse del mismo tamaño si varias personas afirman que lo son (experimento
de Asch).
“Por último, el
trabajo altamente influyente de Zajonc han demostrado claramente que el simple
hecho de ser expuesto repetidamente a una imagen dada (como la bandera
francesa, en este caso) tiende a favorecer los sentimientos positivos y reducir los sentimientos
negativos que experimentamos al respecto.
En momentos en que la
sociedad francesa busca la unidad y la respuesta adecuada a la agresión que
acaba de sufrir, es esencial permanecer lúcido sobre cómo la opinión pública se
construye y se mueve dentro de las redes sociales y, por tanto, en Facebook.”
Hasta aquí lo señalado por el artículo que, a todas luces puede ser aplicado en
otros contextos sociales y que alerta acerca de cómo las redes sociales no
escapan a la manipulación de la que los individuos y las sociedades han sido
objeto a través de los años por parte de los medios masivos y la publicidad.
En México cada vez se
recrudece más el ambiente político y la tentación de reprimir las redes
sociales se ha hecho manifiesta con varios intentos de legislar al respecto y
de la forma más burda posible. Se sabe por diversas fuentes que el espionaje en
las redes en este país, es la constante. Y vale la pena pensar, hablando del
ejemplo de los colores patrios que suscitan “empatía”, el hecho de que el PRI
se ha negado a “soltar” dichos colores que ostenta a manera de secuestro
perpetuo en su logo como partido dictatorial, por cierto, cada vez más
envilecido, pero que por alguna razón –y podemos comenzar indagando en las
teorías psicológicas aquí apuntadas- todavía no se muestra en las urnas un
rechazo absoluto y contundente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Magnífico artículo. Pone ene evidencia la manipulación de la sque siempre hemos sido objeto los seres humanos; y ahora como somos manejados por el Facebook...
Es indiscutible la veracidad de este artículo, la vigilancia sobre el pueblo a través de las así llamadas redes sociales y el efecto manipulador se desprecia pero su efecto es mayor al que podríamos reconocer. Excelente artículo.
Publicar un comentario