Resumen y opinión de Hasardevi
En su artículo de hoy 16 de junio 2009, Javier Flores dice en La Jornada que mientras en la OMS se declara la alerta 6 de la pandemia, en México el secretario de Salud Córdova Villalobos dijo considerar la posibilidad de levantar por completo la alerta sanitaria en México.
Flores resalta también el que mientras en México los casos de muerte por influenza disminuyen en mayo y junio, en los EUA y Canadá las muertes aumentan y el virus se extiende por el planeta. Se alude también a la falta de información fidedigna por parte de las autoridades mexicanas, como es costumbre, respecto a esta situación de salud pública:
“Hay muchos ejemplos de datos confusos y ocultamiento de la información que se han acumulado desde abril. Se podrían dar varios ejemplos –como mantener en la oscuridad las fechas de origen de las muestras que aún no han sido procesadas–, pero me voy a referir aquí a un solo aspecto: las muertes. Las dos terceras partes de los decesos ocurridos por el nuevo virus de la influenza A/H1N1 han ocurrido en México. Esto ilustra inequívocamente la enorme debilidad de nuestro sistema de salud.”
A partir del 27 de mayo se eliminaron dos gráficas de los informes de la Ssa. La más importante, a mi juicio, es sobre el número de muertes por la fecha en que ocurrieron, dice Flores, y he aquí lo paradójico de dicha información ya que fue en mayo precisamente cuando se registraron más muertes en el planeta debido a la influenza y aunque pueda decirse que las muertes ocurridas en mayo eran de muestras rezagadas, considera que el Instituto Nacional de Referencia Epidemiológica está tratando de justificar una mentira. Javier Flores plantea dos preguntas: ¿por qué eliminaron esa información? ¿Por qué la gente sigue muriendo en México por el nuevo virus A/H1N1 cuando la epidemia está controlada o ya se acabó?
Flores termina así su argumentación: “Se desaprovechó la oportunidad para determinar acciones permanentes ante el nuevo virus A/H1N1. No sólo hay que esperar al invierno, ni basta con formarse en la lista de compradores de una futura vacuna. Hay que empezar de nuevo y decir la verdad. Es indispensable eliminar los mensajes triunfalistas y volver a poner el énfasis en la protección de nuestra población.”
Lo más grave del caso, parece ser como siempre, la forma mentirosa, irresponsable, inhumana en que esta situación de salud pública se ha manejado no sólo en México sino en todo el mundo. Por ello, lo único que puedo concluir es que reafirmo mi creencia en que las epidemias son producto de la estupidez humana, y que su combate comienza por rectificar esa forma estúpida de pensar y actuar respecto al ambiente en el que todos somos interdependientes. Eso, además de tener las pruebas de que todo esto tiene también un fondo económico (que representa millones de millones de dólares en ganancia para algunos), y un fondo político debido a la falta de voluntad para resolver una crisis económica provocada por el modelo capitalista, todo esto, a nivel mundial claro está.
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