En Tegucigalpa, los dados están trucados

l'Humanité jeudi 19 novembre, 2009

Los golpist as, al rechazar el acuerdo para salir de la crisis, exteriorizan claramente su voluntad de conservar el poder. Las elecciones generales del 29 de noviembre, sin ninguna garantía, lo demuestran

Los golpistas que derribaron al presidente Manuel Zelaya, el pasado 28 de junio, se obstinan en organizar elecciones generales, avivando las tensiones. El acuerdo de San José- Tegucigalpa está clínicamente muerto. Cerrado entre los representantes de las autoridades legítimas y el régimen de facto, bajo la batuta de los EE.UU. y de la Organización de Estado Americanos (OEA), preveía, entre otros asuntos, el regreso al poder del presidente legitimo. Pero las maniobras de la administración norteamericana han podido con un acuerdo que ya era inestable desde el principio. Ésta ha favorecido a los facciosos que realmente nunca han tenido la intención de dar marcha atrás ni retractarse. A menos de dos semanas de las elecciones presidenciales, lo único cierto es que la transparencia de estos escrutinios no está garantizada. Desde el 28 de junio, al menos 3.500 personas han sido detenidas y más de 600 heridas por las fuerzas militares en el curso de las manifestaciones, se cuenta un centenar de asesinatos, y los medios que se han mostrado insumisos al golpe de Estado, han sido regularmente censurados, o cerrados.

Toque de queda, Estado de excepción, el régimen no ha escatimado la represión. Aún cuando el Congreso hondureño votase la restitución de Manuel Zelaya, después del nombramiento por el presidente de facto, Roberto Micheletti, de un gobierno sometido a sus intereses ¿se podría hablar de un retorno al orden constitucional ? En estas condiciones, Zelaya ha declarado que no podía avalar este Estado de no-Derecho. El Frente Nacional de la Resistencia y el Consejo de Organizaciones Populares e Indígenas (COPINH) han anunciado que no reconocerán las elecciones, a las que califican de “farsa”.

Al menos 110 candidatos a las municipales y 55 a las legislativas, han decidido tirar la toalla, así como el candidato independiente a la presidencia, Carlos H. Reyes. El portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly ha proclamado : “¡Seguimos en contacto con los dos partidos, por medio de nuestro embajador en Tegucigalpa, y de Craig Kelly (diplomático del Departamento de Estado- NDLR) !”

Los candidatos a la presidencia, Porfidio Lobo, del Partido Nacional (conservador), y Elvin Santos, del sector del Partido Liberal que ha apoyado el golpe, encabezarían la carreta electoral, según sondeos publicados en la prensa permitida.