Por Hasardevi
Sería un error hacer creer a los ciudadanos que se indignan
que los partidos políticos son impotentes. Al contrario. Vivimos en
democracias que sólo pueden cambiar de orientación si los grandes
partidos políticos son animados por los ciudadanos. Stéphan Hessel ( http://tinyurl.com/d68tp4z )
Hace unos días murió a la edad de 95 años Stéphan Hessel, humanista, ex
resistente durante la ocupación Nazi en Francia, judío defensor de los
palestinos, co-redactor de la Declaración de los Derechos del Hombre, autor de Indignez
vous! o ¡Indígnense!
En una de sus obras más recientes, escrita junto con Edgar Morin, El
Camino de la Esperanza: Ciudadanos ¡A la acción!, llama a no dejarse
llevar por un idealismo inactivo o, peor, por el cinismo. Tanto Morin como
Hessel afirman su convicción en el camino de la política, a pesar de las crisis
que el mundo enfrenta hoy en día.
Al abundar en la problemática actual en el mundo, las varias crisis que
convergen al fin en una verdadera crisis de civilización, ambos pensadores y
hombres de acción, concluyen en que “No basta con enumerar medidas guías, en
vista de la complejidad y la interdependencia de todos los problemas. Como base
de todo, hace falta una reforma del pensamiento, en el modo de vivir y en la
educación. Si se desea una verdadera transformación, hay que trabajar en todos
los frentes al mismo tiempo”. “Otra
política económica es posible y no pasa sólo por el desarrollo de una economía
verde, sino por importantes trabajos de revitalización del campo, la
descontaminación y la re humanización de las ciudades.”
“Podemos rebelarnos, aspirar
a otra vida democrática pero, una vez que esta inspiración se manifiesta, estos
movimientos se rompen. Es importante ante todo elaborar un pensamiento político
fundado sobre un diagnóstico de la situación.”
MORENA comienza a nacer desde que se da la
resistencia civil pacífica, eso me parece evidente en las creativas
manifestaciones de la gente tanto en la ocupación del Zócalo y Reforma como en
las marchas y acciones en protestas y en defensa de los bienes de la nación y
el pueblo. En los círculos de reflexión que desde entonces comienzan a abrirse,
en las radios alternativas que difunden y comunican como oasis en el desierto
de desinformación y calumnia.
Lo que hace Andrés Manuel López Obrador, es
recoger el sentimiento de la gente que él percibe tanto en los mítines
multitudinarios, de cientos de miles o en las pequeñas plazas con la gente que
lo rodea, le habla, le escribe cartas... Así, se va conformando un movimiento
que, aunque cambiando de nombre, engloba la indignación de muchos que ya no están
dispuestos a seguir pasivos ante la tempestad política y la debacle de toda índole
en el país.
Artistas, intelectuales, incluso algunos
empresarios, se van uniendo alrededor de la convocatoria de AMLO. Políticos de diversas
corrientes de la izquierda y también expriistas, confluyen. Siempre hay un ala
de la izquierda que muestra su inconformidad con algunas posturas políticas de
López Obrador, lo hace en forma soterrada o abierta según su conveniencia, pero
siguen medrando a costa de la figura carismática del líder. Saben que la gente
los rechazará si abren demasiado su juego, ese de navegar en dos aguas y de
hacer de la política su negocio personal, incluso familiar.
Las presiones en los partidos de izquierda,
especialmente en el PRD del cual AMLO fue miembro fundador, arrecian y, en
ocasiones, éste debe ir a contracorriente en su propio terreno. La gente se
disgusta y le exige que abandone el PRD. AMLO permanece ahí y se conforma la
coalición de los tres partidos de izquierda para llevar de nuevo su candidatura
a la presidencia: no había otro camino; eso o renunciar a la aspiración de
llegar al poder... de manera pacífica.
Pero llegar al poder ¿para qué? para poder
desde ahí, llevar a cabo los cambios necesarios para rescatar al país
en todos sus aspectos: educación, campo, economía, seguridad social, combate a
la inseguridad y la corrupción reinante, en fin, sacar al país del estado
decadente en que se encuentra.
Los partidos políticos van a remolque de la economía, cuando es la economía la que
tendría que ir a remolque de la política. Pero hay una posibilidad de
regeneración, y hay que trabajar en esa dirección. E. Morin
A quienes se
indignan hay que decirles que no se queden fuera del funcionamiento
institucional del país.Hessel
Se perpetra el nuevo fraude y las “izquierdas”
toman las posiciones que a cada cual conviene. Se hace más descarada la posición
colaboracionista del perredismo chuchista y por fin, llega el día en que AMLO
anuncia su salida del PRD, no sin antes agradecer a los tres partidos, PT, PRD
y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) su apoyo para la candidatura y
campaña hacia la presidencia.
¿Qué sigue? se preguntaba la gente. Había
dolor, enojo, frustración, sentimientos encontrados en la gente que había
votado por AMLO y aun en aquellos pertenecientes al Movimiento.
Ya MORENA se había conformado legalmente
como Asociación Civil y ciudadanos alrededor de la República trabajaron con ahínco
para la campaña y en la organización de este Movimiento de Regeneración
Nacional. Apareció en el panorama también, un refrescante movimiento juvenil a
raíz de los 131 estudiantes de la Universidad Iberoamericana que no permitieron
que el candidato del PRI sorprendiera su buena fe mintiéndoles durante su
visita a esa casa de estudios. Muchos militantes de MORENA se entusiasmaron con
la llegada de este aire fresco y esperanzador: la juventud movilizándose de
nuevo ¡por fin!.
No bien llegaba al poder el nuevo delfín de
la oligarquía y volvía por sus fueros la clase política más añeja y corrupta,
reciclada en trampas e incluso, se puede afirmar que patrocinada por los
monopolios televisivos; la represión se hizo presente. El miedo como forma de imponerse
se utilizó inescrupulosamente.
Tomó la escena, de nuevo, el enmascarado de
estambre quien hacía esporádicas apariciones para denostar abiertamente a López
Obrador y a toda la izquierda. La confusión se instala de nuevo. Aguas para diferentes molinos.
No obstante todo ello, MORENA prosiguió su
camino y se planteó la posibilidad de convertirse en partido lo cual provocó cierta
turbulencia y algunas acusaciones, inconformidades y escepticismo en algunos.
Así y todo, los “protagonistas del cambio” continuaron trabajando en la
organización.
¿De qué manera, si no en un partido político,
podría MORENA tener los recursos para lograr los cambios que se ha propuesto?.
¿Cómo podrá ocupar las curules hoy comprometidas en dádivas y corruptelas para
desde ahí, defender lo que por derecho corresponde a la nación y al pueblo de México?
¿Cómo, el líder que es –escogido por la gente, y de ello hay documentada
constancia- que es AMLO podrá tener los medios y el foro para poder continuar
este trabajo, compartido por un nutrido grupo de intelectuales y artistas y
ciudadanos comprometidos. Este trabajo de re-educar políticamente a los
mexicanos, combatir el opio de los medios y ayudar a un renacimiento ético de
la vida social que tan deteriorada está? La principal razón es política, la
siguiente, es económica.
Para quienes temen que su bolsillo sufrirá
por la creación de nuevos partidos: Los partidos políticos reciben dinero de
las arcas de la nación en cierta proporción regulada por la legislación
electoral. Esto puede cambiar y hacerse más estrictos los controles para la
conformación de los partidos y la transparencia en el gasto, limitando además
los recursos, por ejemplo. Pero antes, de todas maneras el PRI en el gobierno
tomó el dinero de las arcas a manos llenas para perpetuarse en el poder y
enriquecer hasta la náusea a una camarilla cortesana que hoy, ya es parte de la
oligarquía “reinante”.
El alza de impuestos hoy, la puesta del
petróleo en manos privadas y extranjeras, no tiene que ver con el dinero que se
entrega a partidos políticos, sino a la necesidad de recursos por el saqueo a
las arcas que se da constantemente y que se vio acrecentado por el grosero
derroche durante la campaña de Peña Nieto y de los demás candidatos del PRI, e
incluso del PAN. De todo esto hay testimonio documentado en revistas, periódicos
y sobre todo, en las redes.
De cualquier forma, partidos satélites como
el PANAL o el “Verde”, seguirán siendo protegidos por aquellos a quienes
sirven. Por eso es necesario combatir, desde dentro, las políticas que permiten
tales abusos.
Por otra parte, MORENA, en tanto partido
político, no tiene por qué renunciar a seguir siendo un movimiento ciudadano de
masas, a promover asociaciones culturales que le permitan difundir su ideario.
Hoy, con un régimen corrupto y autoritario restablecido, que con intentos de legitimación con ajustes de cuentas y enviando mensajes de poderío: amenazas veladas también a verdaderos opositores, como bien hace notar en relación al caso Elba Esther Gordillo el Dr. Héctor Díaz Polanco ( http://revoluciontrespuntocero.com/el-arresto-de-elba-esther-hector-diaz-polanco/ ) es necesario hacer un frente opositor real, fuerte y al amparo de nuestra Ley Suprema; tomar la escena como protagonistas del cambio verdadero, por todos los flancos.
Como dicen Morin y Hessel:
... “Hace falta una fuerza
organizadora dotada de un pensamiento político capaz de dar un sentido, una
dirección a la acción.”